Tokio, verano de 1947. Suspendidas sus actividades durante la Segunda Guerra Mundial, la influyente Sociedad de Tatuajes de Edo, dedicada al antiguo arte japonés del tatuaje de cuerpo entero, vuelve a recuperar sus celebraciones con un gran concurso que premie la mejor obra plasmada en la piel. Entre los participantes, mayoritariamente hombres, se encuentra la bella y rebelde Kinue Nomura, hija de un afamado artista del tatuaje, que es recibida con una ferviente ovación al mostrar la figura de una gigantesca serpiente de tinta.

Relacionada con destacados miembros de la mafia local, Kinue desaparece de forma misteriosa después del evento y es hallada días más tarde descuartizada en el baño de su casa con la puerta cerrada por dentro. Aunque un vecino afirma que nadie ha entrado ni salido del apartamento, tampoco queda rastro del impresionante y codiciado dibujo en el torso de la joven. Mientras el inspector jefe Daiyu Matsushita, del Departamento Metropolitano de Policía, y su hermano Kenzo, forense que conocía y amaba a la víctima, se hacen cargo de las pesquisas, una retahíla de crímenes similares en el entorno familiar de Kinue viene a enturbiar la solución del caso.

Ambientada en un Tokio posbélico, entre tropas de ocupación y bandas mafiosas, tradiciones centenarias y ruinas bélicas, El misterio de la mujer tatuada, publicada en japonés en 1948 e inédita en español hasta ahora, es una de las novelas de misterio más emblemáticas de Akimitsu Takagi, un autor de culto en todo el mundo y considerado el Simenon japonés.

Nos adentramos en un Japón de posguerra, donde la cultura del tatuaje se entrelaza con una sociedad que empieza a abrirse al cambio. La ambientación está increíblemente bien lograda, con detalles cuidados que transmiten a la perfección la esencia de la época. El contraste entre tradición y modernidad se respira en cada página, y eso lo hace aún más interesante.

Aunque el grupo de protagonistas puede parecer muy dispar para ese contexto histórico —con ideas avanzadas y mentalidades abiertas, dentro de lo que la época permite— están muy bien construidos. Sus dinámicas, aunque sutiles, aportan mucho a la tensión narrativa. Y la protagonista femenina… es un misterio de pies a cabeza. Te mueres por conocerla y desentrañar todo lo que oculta. Hay algo magnético en ella, y no sabes si confiar.

La parte del thriller está perfectamente hilada. El autor sabe cómo meterte en los detalles que no se ven, pero están ahí. Y mientras lees, te preguntas si vas por buen camino o si simplemente estás tan metida en la historia que ya estás flasheando y nada es lo que parece. 🔍

También destaco la pluma del autor: aunque no es especialmente emocional, conduce la historia con precisión. Pocos personajes, pero todos bien definidos, igual que las escenas —muy visuales, sin recurrir a lo escabroso, pero efectivas para crear el impacto justo. No se recrea en la violencia, pero logra dejarte imágenes potentes en la mente.

Una de las cosas que más me ha gustado es cómo se entrelazan los elementos culturales —como el arte del tatuaje japonés, cargado de simbolismo— con el misterio. No es solo un adorno, sino parte central del relato. Eso le da una dimensión distinta al thriller clásico y te deja con muchas ganas de investigar más sobre el tema.

✨ Así que sí: súper recomendado para quienes disfrutan del thriller, del Japón de posguerra y de la cultura del tatuaje, que en este libro tiene un peso clave.

📚 ¿Lo conocías?
🖋 Si te gusta este tipo de thriller, ¡guarda esta recomendación y cuéntame tus favoiritos

*************************************

¡Nos leemos!

Os saludan las Destripadoras de Libros ;).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *